En el Centro de Análisis y Raciocinios Ajustados, Justos y Ordenados de Nayarit AC, por sus siglas el CARAJO, efectuamos un raciocinio sobre la situación que guardan las negociaciones respecto al contenido del ceviche fiscal en el Palacio de las Divisiones Senatoriales, que nos piensan recetar a partir del 2010, las conclusiones las presenta yo merengues:
Este campestre escribano está harto, atiborrado, empachado, hastiado por la lectura que están enviando a la palestra las tribus partidistas sobre como toman decisiones financieras sin el sentido común que se requiere en beneficio de las llanuras ciudadanas, como es posible? que las diatribas y desacuerdos estén pegando desde ahorita a las cotizaciones de valores en la Congregación de las Inversiones Santas, Sacras y Quiméricas. Las ambiciones de grupos granujas que dicen conformar la clase política, tienen asfixiado a la grey ciudadana con sus contradicciones y errores, bien vale la pena recordarles el objetivo que tiene la política como una rama de la Ética…. Y que no deben pertenecer a ella filibusteros, corsarios, bucaneros, ni vikingos defensores de intereses con raíces profundas en negocios corruptos que han crecido al amparo de simulaciones y operaciones arregladas de antemano.
En la política, siempre se debe de velar, por el bien común. El bien del todo. Por lo mismo, es que los medios a utilizar en la política no pueden estar viciados. No se debe de pensar en la política, como la concepción de Maquiavelo. O sea, el fin justifica los medios. En política, aquella consigna no puede o no debe operar. Ya que si los medios para llegar al fin, son intrínsecamente malos, pues bien, el fin por más bueno que sea, se encontrará viciado. Por lo mismo, las autoridades electas, deben ser escogidas por tener una trayectoria recta, dentro de la política.
Deben ser personas a las cuales se les puede imitar!!, por el resto de la sociedad, que muestren rectitud y decencia. De otra manera, con personas o autoridades corruptas, que vician los medios y que ejercen de manera incorrecta la potestad que les ha entregado el pueblo, el camino seguro, será a una corrupción generalizada del fin de la política. No existirá bien común, sino un bien para algunos, para aquellos cercanos a esas autoridades. Y esto es lo que predomina, un esquistamiento sanguijelero que año con año maman a mas no llenar las ubres de la vaca presupuestal, sin tapujos, sin miramientos de honradez.
Políticos que en su vida no han rendido cuentas, porque para eso están las influencias, el compadrazgo, el amiguismo y el arribismo –hoy por ti mañana por mí, en el camino andamos-, expresión que permite tejer una telaraña de intereses sordos y temibles que corrompe todo lo que abarca en menoscabo de la transparencia en el uso de los recursos públicos.
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