Eran las 4:20 am de la zona Pacífico, cuando en el Salón de Decisiones Plenas, Trascendentes y Tracaleras del Congreso de la Desunión, salió humo blanco anunciando Impuestum Habemus, como presagio de las inconsistencias legaloides –dado que el aumento en IVA al 16% no se discutió en la Comisión de Hacienda- al haberse determinado en una negociación de última hora fuera del recinto cameral y haberle dado el réquiem con cánticos absolutorios al nonato COCO del 2% destinado a subsanar la pobreza, a cambio de un 1% adicional de IVA, los tricolores dándose golpes de pecho aducen que sus estatutos les prohíben aceptar incremento al IVA, sin embargo encuentran el consuelo a dicha pena rezando dos ave maría por el sacrificio de San Justín Bodoque al asumir el costo político de dicha decisión.
A esa misma hora, Rick hace presencia en la parcela náyara con viento y una lluvia atemperamentada, acorde a las decisiones que afectarán la economía de los ´mexincalzones´, y se solidariza con la situación al manifestar su enojo en forma tenue, sabedor de su poder destructor, aterriza condescendiente ya que si provoca un desastre menos serán los recursos para apuntalar la infraestructura que impulse la riqueza ausente para las mayorías.
Aflora el espíritu romántico con lo nublado y la tersa lluvia, un café acompaña la reflexión y las risas de los niños se enclaustran en sus habitaciones, ausentes de los patios escolares. Rick con su poder, cambia decisiones, similar a los diputados cuyo poder se ve limitado en el conocimiento de las necesidades de un país ávido de justicia y equidad fiscal, novatos la mayoría, presionados mientras acomodaban sus escritorios y sillones en sus acogedores espacios en San Lázaro, porque entraron un 8 de septiembre a la palestra legislativa y en un término de 42 días, debían entender las recetas fiscales apuntaladas por la OCDE y el Fondo Monetario Internacional, conjugar las presiones de los grupos de poder y decidir quién va a financiar el gasto público, misión imposible delegada en los grupos de asesores económicos de las alas políticas.
En la escala Cartens-Calderonis, el huracán tributario hizo mella en las costas financieras con una intensidad del 30% para ISR, 16% en IVA –zona fronteriza un 11%-, para el IDE un 3% limitando los vientos en 15,000.00, el casi ignorado IETU, suelta sus ráfagas hasta en un 17.5%, y los ventarrones del IEPS quiere tumbar borrachos, y disminuir la población de ´nicotinos´ y acotar el desarrollo del internet y cable a la clase “impudiente” al establecer cargas que absorberá el usuario final.
Existe en el ambiente una ventisca que anuncia la llegada de aumentos en la temperatura energética, al mover los subsidios a la baja en gasolina y electricidad, y se espera que dos que tres contribuyentes azoten cual árbol con raíz endeble. Mas sin embargo, se observará una tromba cuando se realice el reparto del ingreso previsto, y asomen los rayos y centellas sobre las partidas raquíticas y como se dice en mi pueblo a río revuelto ganancia de la “partidocracia”.Cuadre: Que le caiga un rayo a quien no asuma la Austeridad, y una centella a quien se embolse recursos públicos, es el deseo de Barbecho para el 2010 en materia presupuestal y mi contribución moral para resarcir el dispendio oficial. En Nayarit podemos, si podemos!
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