310 MILLONES A CAMBIO DE QUE?

310 MILLONES A CAMBIO DE QUE?

Hoy es un día trascendental en el aspecto político, me atrevo a vislumbrar que será un parteaguas en materia de política exterior y en materia económica-financiera, las cartas están sobre la mesa del Póquer o Póker Internacional, los jugadores prestos, listos para presentar sus estrategias por un lado el “team” Los Bicentenarios, encabezado por Paty Espinosa, canciller mexicana, por el otro Los Conquistadores, con Diane Rodham –Hilaria Clinton para nosotros-. Ambos equipos intercambiarán información, diseñarán estrategias y darán seguimiento a los proyectos de seguridad.

La Iniciativa Mérida tiene como objeto promover la cooperación entre los dos países conforme a los principios de autodeterminación, no intervención, igualdad jurídica y respeto a la integridad territorial. Para aumentar la capacidad operacional de los organismos e instituciones de México, en la estrategia figuran la mejora de la transferencia de equipos y recursos técnicos; incluyendo programas de capacitación y el intercambio en ambos sentidos de los expertos, pero no prevé el despliegue de personal militar de Estados Unidos en México, ya que ha quedado asentado que la iniciativa no faculta a las autoridades de una de las partes a emprender, en el territorio del otro, el ejercicio de funciones cuya jurisdicción o competencia estén exclusivamente reservadas a las autoridades de esa otra parte.

El póquer o póker, es un juego de cartas de los llamados de "apuestas", en los que los jugadores, con todas o parte de sus cartas ocultas, hacen apuestas sobre una puja inicial, recayendo la suma total de las apuestas en el jugador o jugadores con la mejor combinación de cartas.

Hay muchas variantes de póquer, entre las que caben señalar el póquer abierto, póquer cerrado, póquer de cartas compartidas y póquer surtido.

Esperemos que el equipo Bicentenario haga las combinaciones adecuadas para resultar ganadores en este segundo encuentro de alto nivel en materia de seguridad, aunque sea póquer cerrado; la buena voluntad de los adversarios ha quedado de manifiesto con la solicitud de 310 millones de dólares para el 2011 y que entra en vigor el 1º de octubre de 2010; la reciente entrega de 5 helicópteros Bell a la Defensa Nacional, dan muestra que México no puede ejercer su fortaleza sin apoyo internacional.

Entre los principales observadores estarán, los quelonios legislativos enredados en un chinchorro puyequero, teñido con extracto de “hueva” de centurión, junto con los crustáceos decápodos de agua dulce que habitan en el Estero de las Confrontaciones ubicado a un costado de la Playa de San Lázaro; ya algunos de ellos estuvieron capacitándose legislativamente en los EEUU para estar en condiciones de adaptar el marco jurídico a las condiciones internacionales y que escondidamente, pretende hacernos mas codependientes de ellos. Y digo de observadores, porque este Plan Mérida, no se contempla como un convenio –o tratado- internacional y por lo tanto no pasó por las manos de los quelonios senatoriales, sino que se considera un acuerdo político aderezado con mostaza diplomática y con la característica de responsabilidad compartida en el programa de cooperación.

Las cartas están en la mesa, hace un año nos prodigaron adjetivos cariñosos de que México era un estado fallido, hoy se portan más dulces y nos dicen que no es así, que es sólo por zonas determinadas provocadas por problemas de corrupción en ambos lados de la frontera, pero afortunadamente no somos fallidos.

Los 310 millones de dólares en proyecto, es menor en un 30% respecto a lo autorizado para el 2010, esperemos que aquella enchilada completa que pasó a ser un Taco Bell en noviembre de 2004, por el famoso acuerdo migratorio integral, que intentamos engullirnos de un trancazo y nos quedó atorado en el cogote, por lo menos hoy nos toque un sope de sesos de la cenaduría Doña Amarga y creo que así será, pues el domingo pasado ya lo compraron en Washington los aguerridos paisanos que luchan por sus derechos de regularizar su estancia como ciudadanos que pagan sus impuestos y se curan su influenza con remedio de Doña Macaria –exportada de Jala para apoyar a la salud de nuestros emigrados-, especialista en preparar el Té de Baya de Saúco combinado con la olorosa planta Margarita Equinácea; guardando la esperanza de que con la reciente reforma de salud aprobada para Sir Obama por lo menos les toque un mejoralito.

Pues mis 6 lectores –el último mes se inscribieron 2 más-, esperemos que resurja la recuperación económica con los acuerdos que logren ambos “team”, será de trascendencia para México los resultados para lo que resta en el 2010 como para el 2011. En Nayarit podemos, si podemos. http://barbechofinanciero.blogspot.com